Ana, Gorka y Roger dedicaron tres meses, sin parar de currar, para poder montar esta escuela de circo en un espacio vacío y desnudo de Zorrotzaurre. Conquistando poco a poco el espacio hasta llegar a lo que es hoy en día. Y es que a la escuela no le falta de nada: almacenes, vestuario, una pequeña cocina, dos salas de entrenamiento y un escenario que usan también para actuaciones.
Están muy contentos con como evoluciona el proyecto. Ver que crece compensa todos los esfuerzos. El año pasado impartían 5 cursos y este año han llegado 8, que tocan todas las artes circenses: acrobacias, clown, malabares, flexibilidad, verticales, aéreos y circo joven e infantil.
De momento funciona como una asociación pero lo que les gustaría es que llegara a ser una escuela de circo en toda regla. Y de momento no va mal encaminado, ya que al principio costó, pero cada vez reciben más subvenciones y más gente que se anima a participar.
ZirkoZaurre le da vida al barrio y cada vez más gente lo conoce, pero no se sabe cuánto durará. El plan de renovación de la península impuesto por el Ayuntamiento implica la demolición de multitud de edificios y naves para construir más viviendas, que no hacen falta, pues hay muchísimas vacías y oficinas. Con el plan, que ha tenido numerosos recursos por parte de asociaciones de vecinos de Zorrotzaurre, de Sarriko y San Inazio, desaparecerían espacios como el ZAWP y ZirkoZaurre.